Uno de los mejores amigos de Irena. Reside en el gueto por ser judío. Excelente abogado, es un hombre íntegro, responsable, de carácter y gran patriota. De família burguesa, siempre luchó por Polonia. Antes de la guerra se dedicó a defender diversas causas perdidas: desde los parados polacos desahuciados de sus hogares por los propietarios hasta los derechos de los hijos ilegítimos. Así, se convirtió en una figura muy querida, clave, entre el proletariado polaco y los parados de la periferia de Varsovia.
Fue uno de los fundadores, junto a Mordejai Anilevich, de la Organización de Autoayuda Judía, creada tras los incidentes de noviembre de 1938, en los cuales los establecimientos judíos fueron atacados cruelmente (sucesos conocidos como "la noche de los cristales rotos").
Al estallar la guerra fue llamado a filas como oficial en la reserva. Luchó en el frente hasta la derrota ante la Wehrmacht y consiguió regresar a Varsovia, donde hubo de ocupar una casa en el barrio destinado a los judíos en el futuro gueto. Se siente, ante todo, polaco y no puede aceptar la separación llevada a cabo por los alemanes.
Director del Jugendkreise de la calle Ogrodowa, cuyos jóvenes se ocupan de repartir ropa, comida y todo lo necesario para tratar de vivir con algo de dignidad, recoge también material para publicaciones clandestinas anti-germanas. Se convierte en la mano derecha de Irena en su intento por salvar a la mayor cantidad posible de niños judíos.